México, 16 jul (Prensa Latina) El presidente de México, Andrés Manuel López Obrador, y el gobernador de Jalisco, Enrique Alfaro, del opositor Partido Revolucionario Democrático, pusieron hoy al lado sus diferencias para conciliar posiciones en temas básicos de ese estado.
Jalisco está considerado como uno de los estados más violentos y de mayor inseguridad ciudadana por la presencia de dos poderosos cárteles del crimen organizado, el Nueva Generación y el Santa Rosa de Lima, los cuales libran una encarnizada batalla por el control de la entidad y las que la rodean.
La zona es considerada como una de las más activas del tráfico de armas y drogas hacia y desde Estados Unidos y, en consecuencia, también en cuanto a homicidios dolosos y la forma en que estos se realizan pues muchas veces son operaciones de envergadura como si se tratase de una guerra de posiciones.
Junto con Guanajuato o Guerrero, Jalisco es considerado un objetivo clave de la política nacional de seguridad para pacificar el país, labor que, según admitieron autoridades federales y del estado, estaba afectada por las diferencias públicas entre ambos poderes.
La conferencia de prensa matutina del mandatario se realizó hoy en el Colegio del Aire de la Base Aérea Militar 5, en Zapopan, Jalisco, un municipio clasificado entre los cinco más violentos del estado, pero bien resguardado para evitar cualquier tipo de acción contra los visitantes.
Al igual que planteó en Guadalajara, el mandatario federal expresó su intención de dejar a un lado las diferencias y conciliar posiciones para enfrentar con éxito la pacificación del país y la crisis económica que afecta a todos, y parece que ha logrado sus propósitos.
El gobernador agradeció la presencia del presidente en el estado y admitió que dialogando se encuentran puntos de consenso y se pueden lograr acuerdos sustantivos basados en el respeto y la unidad.
Con esa filosofía, señaló, podemos enfrentar los retos que imponen las crisis en salud pública, el medio ambiente, la economía y el crimen organizado, todas fundamentales para lograr el objetivo de pacificar a México.
Alfaro confesó que sin el apoyo y la coordinación con el gobierno federal es imposible enfrentar la crisis económica derivada de la pandemia de Covid-19, ni neutralizar la incidencia delictiva y agradeció el apoyo brindado por las secretarías de Defensa y Marina en ese empeño, y el despliegue de la Guardia Nacional en el estado.
Por su parte, el secretario de Defensa, Luis Cresencio Sandoval, rindió un informe detallado de los buenos resultados obtenidos en la lucha contra las bandas delincuenciales.